Un sistema de bombeo está compuesto por el ensamblaje de varias electrobombas que forman en su conjunto un grupo de presurización. El objetivo de estos sistemas de bombeo es mantener la presión a un nivel constante, como por ejemplo en el caso de edificios o en general cuando se requieren presiones elevadas.
Gracias al uso de electrobombas de velocidad variable, con o sin inversor, los grupos de presurización también ofrecen una notable ventaja en términos de ahorro energético.
Otros requisitos importantes de un grupo de presurización son la facilidad de instalación y configuración, junto con la adaptabilidad a las necesidades de diseño.
En el caso de las bombas para piscinas, los sistemas de bombeo de agua también incluyen el conjunto de electrobomba y filtro. Estos sistemas de bombeo garantizan la recirculación del agua y los ciclos de filtración para la limpieza y seguridad del agua de la piscina.