Las válvulas de no retorno o de retención son dispositivos que tienen la función de impedir el reflujo del fluido. La válvula de retención se activa automáticamente por la diferencia de presión aguas arriba y aguas abajo del obturador, permitiendo que el fluido fluya en una sola dirección. De esta manera, es posible evitar contaminaciones pero también el vaciado del sistema en caso de parada de la bomba.
Este tipo de válvulas es adecuado para diversas aplicaciones en el ámbito residencial e industrial donde se requiere un flujo unidireccional. Por ejemplo, tenemos válvulas de no retorno para alcantarillado que protegen contra posibles eventos de sobrecarga, o válvulas de no retorno para aire que permiten que el aire comprimido fluya en una sola dirección.
Para adaptarse de manera funcional a las numerosas aplicaciones, la válvula de no retorno no se presenta en un solo tipo. Existen varios modelos que se diferencian por su estructura mecánica.
Los tipos de válvulas de retención incluyen:
A estas diferenciaciones se suma también el material. Según las aplicaciones, es decir, el tipo de fluidos transportados y el entorno en el que se instalan las válvulas, se puede elegir entre acero inoxidable 304 y 316, latón, hierro fundido y plástico.