Encontrar un bolso o mochila de trabajo que permita una óptima organización de las herramientas y materiales es fundamental para encontrar rápidamente lo que se necesita y evitar pérdidas de tiempo.
- Para un instalador o técnico de mantenimiento, un bolso para herramientas contribuye a la organización del trabajo.
- "Cada cosa en su lugar y un lugar para cada cosa": un bolso para herramientas en línea con la filosofía Kaizen es una gran ventaja.
- Un bolso o mochila de trabajo ideal debe responder a necesidades específicas y problemas concretos.
¿Por qué la organización del bolso de trabajo es un aspecto tan importante?
Un instalador sabe bien que su bolso de trabajo no es un simple accesorio, sino un compañero fiable. Pero para demostrarse realmente como tal, el bolso para herramientas debe cumplir con ciertas características que queremos profundizar aquí, empezando un poco desde lejos.
¿Quién no ha oído hablar de la metodología Kaizen? Esta palabra japonesa, que significa "cambiar para mejor", fue acuñada por el economista Masaaki Imai a mediados de los años 80 para indicar la filosofía que está detrás del éxito de la industria japonesa, particularmente de Toyota.
La metodología Kaizen se basa en la convicción de que no se debe tener miedo al cambio, sino orientarse hacia una evolución continua, que empieza desde abajo y procede gradualmente, incluso en las cosas pequeñas. No se trata solo de corregir los errores o lo que funciona mal, sino más bien de una simplificación progresiva y creativa.
De la filosofía Kaizen al bolso para herramientas.
Uno de los pilares de esta estrategia de mejora continua es la regla de las 5S: Seiri - Separar, Seiton - Ordenar, Seiso - Limpiar, Seiketsu - Estandarizar y Shitsuke - Sostener. Se separa lo que es necesario de lo que es inútil y causa molestias, es decir, de lo que provoca pérdida de tiempo y recursos; se organiza lo que es útil siguiendo el lema "cada cosa en su lugar y un lugar para cada cosa"; se mantiene todo constantemente en orden para destacar inmediatamente cualquier falta o ineficiencia; se codifican los procedimientos para que sigan funcionando bien; finalmente, se mantiene siempre alta la atención para apoyar esta mejora a lo largo del tiempo. Es fácil entender cómo, juntas, las 5S pueden contribuir a aumentar el rendimiento y la calidad del trabajo.
La metodología de las 5S se puede aplicar al puesto de trabajo, a su propio ordenador, y, por qué no, también a la forma en que se organiza su bolso para herramientas. Para un instalador o técnico de mantenimiento es fundamental tener siempre a disposición una amplia selección de herramientas y equipos de trabajo para poder realizar cualquier intervención solicitada.
Hay muchos elementos que un bolso para herramientas debe contener: desde herramientas manuales hasta cajas de piezas, desde destornilladores de impacto hasta objetos más voluminosos como manómetros múltiples, mangueras flexibles, cables, interruptores de nivel, filtros hidráulicos, sondas de nivel, pequeñas válvulas hidráulicas. No faltan alargadores, memorias USB, cinta de acero inoxidable, tabletas o portátiles.
Para organizar eficientemente todo el material, se necesitan muchos compartimentos, secciones y bolsillos, donde se pueda disponer cada elemento en el lugar adecuado. En un espacio organizado de esta manera, se hace fácil no solo encontrar el elemento que necesitamos, sino también darse cuenta de si falta, evitando así encontrarse en dificultades en el momento de usarlo.
Las bolsas y mochilas de trabajo VETO PRO PAC están diseñadas para responder perfectamente a estas necesidades. Todo lo necesario para las actividades de instalación y reparación se puede organizar en uno de los numerosos bolsillos (hasta más de 50), cada uno específico para acomodar objetos de diferentes tamaños y formas.
Todo es fácilmente accesible y dispuesto de manera funcional, protegido gracias a los materiales impermeables y la estabilidad general del producto. El resultado es un bolso para herramientas muy compacto pero completo, con todo lo necesario siempre listo para su uso. Estas bolsas no nacieron por casualidad, sino después de semanas de observar el trabajo de instaladores y técnicos de mantenimiento, tocando de primera mano todas las necesidades y las diferentes condiciones de trabajo, con el fin de garantizar en cada circunstancia la máxima practicidad y seguridad.
Porque, como enseña la filosofía Kaizen, las mejores soluciones necesitan de la participación directa y el intercambio.